Centro Comercial Sambil. Isla de Margarita.
Estado Nueva Esparta- Venezuela.
Saludos innovadores!!!
A continuación les brindo este breve ensayo sobre la importancia de la educación y las exigencias en cuanto a las habilidades, pensamientos y valores para el trabajo integrativo en red. Por ello lo denominé:
Educación, tecnología y sociedad: Formación para la organización red
"Hay verdaderamente dos cosas diferentes: saber y creer que se sabe. La ciencia consiste en saber; en creer que se sabe reside la ignorancia”: Hipócrates
RESUMEN
Actualmente, en el marco de las nuevas realidades y en pleno emerger de las exigencias de la sociedad de las telecomunicaciones e información, es necesario entonar, alinear y formar para convivir, hacer, ser y hacer con el otro. La asociatividad, la cooperación, el capital social alrededor de la educación, la investigación y el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación hacia las necesidades y soluciones internas. Las opciones de desarrollo del país deben responder de una manera pertinente a la problemática que más nos golpea; es dar con las respuestas a esos temas que la sociedad ha indicado, ya sea porque le han preguntado su opinión o la que sea interpretada por aquellos cuyo poder de decisión oriente los recursos y la política científica del país. La participación de los distintos sectores: empresarios, sector público, las universidades y la comunidad es una salida que no es negociable para transitar hacia una independencia tecnológica y cultural como país. Es en este sentido en que formar para la organización red será una ventaja para la obtención y ejecución de acciones concretas a nuestras necesidades.
Palabras Claves: Palabras claves: Educación, la organización red, estado de la ciencia, proyecto educativo para dignidad, proyecto TEBAS.
CONTENIDO
Introducción
1.0. Significación de la educación. Del enfoque tradicional al enfoque del socio de aprendizaje
2.0. Educación, tecnología y sociedad informacional
3.0. La organización red
4.0. Una propuesta educativa para la dignidad. Proyecto TEBAS - Universidad Cemtral de Venezuela
5.0. Conclusiones
Bibliografía consultada
Introducción
La educación en los actuales momentos está siendo objeto de críticas, revisión, modificación; es decir, cambios. Cambios en función del emerger de nuevos paradigmas tanto en la tecnología como en la comunicación. No obstante en materia de investigación, ciencia y tecnología está abierta una beta de oportunidades y retos, sin descuidar cómo estamos en estos momentos. Por ello, se discute en primer lugar, el significado de la educación como partiendo de lo básico, la tradición intelectualista y las exigencias de un aprender a conocer, hacer, ser y convivir como prerrequisitos para desenvolverse en el contexto interconectado; a decir de Castells (2009), la organización red y las implicaciones en materia de competencias. También se da cuenta del estatus de la ciencia en materia de la relación de la inversión en educación con el producto interno bruto, los años de escolaridad. Sigue una descripción del estado de la conformación de la matrícula por disciplina, la gente dedicada ala ciencia y tecnología. Por último, se presenta una propuesta de largo y mediano plazo asociado al proyecto Educación para la Dignidad, en el marco del Proyecto TEBAS del profesor Esté (2007).
1.0. Significación de la educación. Del enfoque tradicional al enfoque del socio de aprendizaje
Conocer, aunque en forma sucinta, en este nivel de estudio, es volver a lo básico de lo que se está en juego, es decir, la construcción de un hombre y una mujer para que este mundo sea mejor, desde el aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a ser y a convivir. En este sentido, se definirá la educación.
La educación, (del latín educere "guiar, conducir" o educare "formar, instruir") puede definirse como: * El proceso multidireccional mediante el cual se transmiten conocimientos, valores, costumbres y formas de actuar. ...
Por otro lado, educación es el conjunto de acciones e influencias destinadas a desarrollar y cultivar las aptitudes intelectuales, conocimientos, competencias, hábitos y conductas del individuo, con el fin de lograr el máximo desarrollo posible de su personalidad, de modo que pueda aportar una contribución positiva a la sociedad en la que vive. www.es.wikipedia.org/wiki/Educación
En materia de ciencia, tecnología y sociedad, desde la UNESCO, el trabajo de Delors (2008), indicaba que, el aprender a conocer se relaciona con los el aprendizaje que se adquieren en torno a una o varias disciplinas; el aprender a hacer, al uso exitoso de los conocimientos disciplinares adquiridos y ahora aplicados al contexto donde nos desenvolvemos; el aprender a ser, a la capacidad de la autodirección, responsabilidad, solución de problemas, toma de decisiones y valores propios de los humanos para percibir a los demás y vivir en un contexto social; el aprender a convivir a los valores asociados a la capacidad para establecer y desarrollar relaciones sociales en todos los espacios en donde nos corresponda interactuar.
Poseer conocimientos teóricos en una o varias disciplinas, habilidades para el razonamiento crítico, trabajar en equipo, aplicar lo aprendido, hacer las cosas bien, demostrar capacidad interpretativa, argumentativa y propositiva, ser capaz de analizar, sintetizar, liderar, aprender a aprender, planificar, organizar, implementar, controlar, comunicar y gestionar información, adaptarse, tener y mostrar vocación para el aprendizaje continuo, creatividad, iniciativa y espíritu emprendedor, conocer una lengua extranjera, resolver problemas, tomar decisiones y compromiso ético, son las competencias que es necesario desarrollar durante la vida universitaria para llegar a ser profesionales competentes.
Para alcanzar todo esto, diferenciándose de los demás, es necesario tener en cuenta factores como: la institución educativa en relación con la interacción estudiante-estudiante y docente-estudiante, que es vital para progresar, formar aptitudes, actitudes y logros mediados por el conocimiento; la familia, que es la encargada de dar las bases que permiten al ser humano, en este caso al profesional, desenvolverse en la sociedad.
La familia, junto a la institución educativa, entrega los valores, el apoyo y el cariño básico para que la persona desarrolle la esfera afectiva y emocional en el ser y el convivir; es decir, todo lo que involucra la formación personal, el deseo de superación y el gusto por la adquisición continua de conocimiento.
Es necesario entonces destacar que, ante las nuevas realidades y exigencias de la ciencia y la tecnología, el enfoque de la autora Pérez (2004), sobre las revoluciones tecnológicas, nos anuncia que el impacto de la revolución de la tecnología de la información y de las comunicaciones sigue instalándose en nuestros modos de actuar, de conocer, de hacer y convivir. Es decir, esta revolución implica un mecanismo en que nosotros, en la educación, asumamos un rol que desarrolle y fortalezca las competencias técnicasactitudinales y profesionales que capaciten para fluir en el nuevo paradigma de la sociedad informacional y conectada en redes.
En este sentido, la autora advierte y demuestra, al igual que los autores Barker (2000) y Khun (1999), que todo cambio de paradigma tecnológico lleva consigo nuevas exigencias y cambios en nuestra forma de organizarnos, de cooperar y de gestionar las organizaciones y nuestra vida cotidiana. Nótese que, cada vez más la gente camina leyendo, sí señor, leyendo los mensajes de texto o de páginas web y hasta hablando sólo. Perdón, ¡manteniendo una conversación con otra persona ubicada en cualquier parte del planeta!
Lo señalado anteriormente, permite vislumbrar que la educación, la formación y en especial, el aprendizaje de las personas es uno de los factores que más influye sobre los valores y en general sobre la cultura de los habitantes de un país. En igual forma, se ha encontrado una estrecha relación entre el nivel de educación de un país y su capacidad de generar riquezas. (Jaffé, 2007)
Debe destacarse entonces que, considerando la definición de aprendizaje de Bower y Hilgard (1989), referenciado por Peña, Cayoto, Santaella (2009), “el aprendizaje se refiere al cambio de conducta o en el potencial de conducta de un sujeto en una situación dada como producto de sus experiencias repetidas en esa situación, siempre que el cambio conductual no pueda explicarse con base en sus tendencias de respuesta innatas, su maduración o estados temporales (como la fatiga, la intoxicación alcohólica)” p. 185.
En virtud de ello, el enseñar va más allá de la transmisión de conocimientos, información o datos, de esa tradición intelectualista de la educación (saber=adquirir, acumular. Enseñar= transmitir. Aprender es memorizar); sino, facilitar las condiciones ambientales y pedagógicas para que el individuo aplique / instrumente el saber adquirido por vía de educación formal / no formal. Por ende, saber sería aplicar lo conocido, instrumentar a través de las habilidades y destrezas sobre el objeto o situación de su contexto. Es decir, el saber va más allá de ser una actividad pasiva de recibir información y conocimientos. Saber es trans-formar.
2.0. Educación, tecnología y sociedad informacional. La organización red
La educación teórica, especulativa, alejada de referencias empíricas y prácticas, tiene en Platón a su más antiguo defensor. Para él las disciplinas más valiosas en la educación de quienes debían regir los destinos de la comunidad eran las más alejadas de lo experimental, de lo observable y de lo opinable. De hecho, las matemáticas, que tienen en la descripción de los fenómenos naturales una fácil aplicación práctica, eran defendidas en el modelo educativo platónico justamente por lo contrario: por su naturaleza abstracta, por su alejamiento de lo práctico y porque en ellas no parecen posibles las controversias. Platón es, por tanto, un precursor de una tradición intelectualista que ha despreciado lo práctico y ha defendido el predominio de lo teórico y lo académico en la educación.
Por utópicas que pudieran parecer en el plano político, las propuestas platónicas han tenido un gran éxito en la historia de las instituciones educativas y en la definición de lo que se ha considerado educativamente valioso y se ha venido enseñando en los currículos escolares. En este sentido, el predominio educativo de la tradición platónica explica, al menos en parte, las razones del desprecio hacia la tecnología que ha sido dominante hasta momentos muy recientes de la historia de la educación. La tecnología, por su vinculación con las actividades artesanales de carácter práctico, ha sido merecedora del desprecio de las elites culturales como actividad inferior. La sospecha ha sido la actitud característica de la cultura clásica hacia la tecnológica (Mitcham, 1989).
Se sospecha de la tecnología como una actividad propia de grupos inferiores, que por mirar hacia lo real, se incapacitan para ver lo ideal. Y se sospecha también de la transformación tecnológica de la realidad porque es considerada como la voluntad de transgredir las leyes inmutables que gobiernan y deben gobernar el funcionamiento de la naturaleza.
También cada ser humano acaba siéndolo porque va accediendo a diversas habilidades que definen su cultura. Eso que llamamos educación, que no deja de ser la variante institucional de lo que en otros tiempos había sido la socialización, consiste en el progresivo dominio individual de numerosas técnicas. Aprender a leer y a escribir es, antes que acceder a un universo simbólico, adquirir destrezas en una serie de herramientas que se utilizan con el propósito de comunicar, es decir, de intervenir y modificar el entorno social en el que se vive. Esas herramientas y esas destrezas son técnicas, y no sólo en un sentido metafórico.
No hay razones para que la tecnología haya de quedar fuera del repertorio de lo valioso en educación. Y, sin embargo, así ha sido. Se ha ocultado o enmascarado lo que de técnico hay en lo educativo. Se ha dejado, además, que las actividades técnicas hayan quedado fuera de los currículos educativos básicos hasta hace bien poco tiempo. Lo técnico ha sido excluido de los ámbitos centrales que conforman la educación escolar de los ciudadanos, quedando relegado a los espacios marginales de la formación profesional o a las formas de socialización externas a los sistemas educativos reglados.
Especialmente en los países latinoamericanos y en nuestro país, sólo en las reformas educativas de los últimos años la tecnología aún le falta tener una presencia sustancial en los currículos básicos de las etapas obligatorias. De hecho, la inclusión de contenidos tecnológicos en los currículos ha sido una de las notas que ha caracterizado las voluntades modernizadoras e innovadoras que han impulsado esas reformas. Pero, a la vez, desde los sectores educativos más conservadores se ha recuperado el discurso, propio de la tradición platónica, de la sospecha hacia la tecnología y se ha criticado intensamente esa presencia de los contenidos tecnológicos al lado de los contenidos de las disciplinas tradicionales: las ciencias, y, muy especialmente, las humanidades.
En Venezuela, los años noventa fueron los de la aplicación de una reforma educativa que, por primera vez, creó espacios y tiempos curriculares para introducción de las enseñanzas tecnológicas en la educación secundaria obligatoria. Con la implantación de la reforma educativa de la década pasada se incorporaron a los institutos los profesores de tecnología, un grupo docente que antes estaba recluido en las enseñanzas específicas de formación profesional, consideradas tradicionalmente como vías formativas inferiores.
Sin embargo, al hacer un repaso por los distintos pensa de las carreras académicas y en especial, la de ciencias sociales, administración, contaduría, economía, en general las ciencias administrativas, gerenciales o empresariales, la presencia del estudio de las bondades y procesos asociados a la investigación y desarrollo de la ciencia y la tecnología en el marco de lo social, ha estado básicamente ausente.
En este sentido parece que existiera una suerte de «principio de inercia platónico», que hace que la práctica educativa consista en la transmisión de saberes cristalizados que se enseñan de forma dogmática y abstracta y que se hallan completamente alejados de la vida. Tal principio supone que las tendencias innovadoras sólo tengan algún efecto en la modificación del reposo o movimiento rectilíneo y uniforme de la escuela en la senda del academicismo mientras se aplican como fuerzas continuas. Una vez que tales fuerzas han sido integradas por las inercias, resulta indiferente si los contenidos enseñados han de ser las verdades reveladas, la filosofía estoica o las leyes de la termodinámica. Cualesquiera que sean, cumplirán su función de mostrar la supremacía de lo teórico sobre lo práctico, de lo abstracto sobre lo concreto y del saber sobre el hacer.
Por tanto, se entiende la oposición que las propuestas de educación tecnológica han despertado entre los saberes escolares tradicionales, sean las humanidades, o, incluso, las ciencias. En este momento les ha tocado a las enseñanzas tecnológicas el turno de enfrentarse a la tradición y encarnar, en cierto modo, el impulso de la modernización. Pero la historia muestra que las tendencias inerciales en educación son muy fuertes y han resistido muy bien los embates de las anteriores rebeldías contra la tradición.
Quizá una buena estrategia para entender por qué sucede esto, y, por tanto, intentar evitarlo, sea comprender algo especialmente importante para la educación tecnológica: que la propia educación es ella misma una tecnología. La escuela no es sólo el lugar donde se enseñan y quizá se aprenden contenidos humanísticos, científicos y hasta tecnológicos.
La escuela es ella misma un mecanismo social, un dispositivo que cumple importantes funciones que no siempre coinciden con lo que de ella se predica. La escuela puede ser para algunos el instrumento que les permite la promoción social, pero a costa de funcionar como un filtro, como una suerte de «demonio de Maxwell» (Bourdieu, 1994) que distingue a los alumnos en función de su capital cultural. Y para que el mecanismo funcione, para que su papel selectivo pueda cumplirse, es necesario contar con saberes abstractos que, como bien viera Platón con las matemáticas, hagan de filtro y faciliten la selección. A partir de aquí que lo enseñado, y sobre todo lo evaluado, sean las humanidades o las ciencias poco importa con tal de que quede claro su marcado carácter teórico, elitista y alejado de las actividades comunes de la vida práctica. Es evidente que la educación tecnológica no es, en principio, una buena candidata a ocupar un lugar en ese dispositivo escolar, aunque, como la historia ha demostrado, hay formas de tergiversar el sentido inicial de cada campo novedoso que llega a la escuela para acomodarlo a las funciones que ha de cumplir en ella.
El reto ahora es decidir qué papel ha de cumplir la educación tecnológica en la tecnología de la educación, en la tecnología de las ciencias gerenciales y en la investigación y desarrollo porque puede servir para reorientar esas funciones, recuperando de forma consciente la genuina relación entre educación, tecnología y humanización.
Un reto clave es continuar el tránsito hacia una educación humanista con forma de desarrollo, tal como lo señala Martínez (2009): fidelidad a lo humano y a todo lo humano, desarrollo personal, importancia del área afectiva, tendencia natural hacia la autorrealización, conducta creadora, valores como estructura básica y educadores como personas y modelos. En igual forma, ese aprender a conocer, hacer, ser y convivir en la sociedad informacional y en un esquema de organización red; ya sea en las instituciones educativas, en las empresas, en las instituciones de investigación, sector público y hasta en los esquemas de redes de investigación e innovación. Es la preparación para trabajar y cooperar en y con, la organización red.
3.0. La organización red
En cuanto a las organizaciones y los nuevos esquemas organizativos asociados a la sociedad informacional en la que estamos en tránsito, debe destacarse el convivir en y el convivir con las organizaciones a la luz del tiempo que corresponde:
A) Viviendo EN las organizaciones del siglo XXI:
-Las organizaciones están llegando al límite de los seres humanos. Lo global de las organizaciones y la desaparición de sus fronteras hace que la horizontalidad, la flexibilidad y la resiliencia en la capacidad de respuesta y de organizarse, sean pautas de acción, ya el autor Charan (2007) en su libro The starfish and The spider, indica los patrones emergentes de las organizaciones tipo estrellas de mar; a la cual, le cortas un pedazo de ella y al tiempo, se autoregenera y sale nuevemente esa parte. Fue lo que hicieron los SIUX con los españoles, quienes por su caráter guerrero y su organización estrella de mar, pararon practcamente a los españoles en el sur de los Estados Unidos. También sostiene que la Organización " Alcohólicos Anónimos" funciona en todas partes, sin una cabeza o presidencia a nivel mundial.
Consideró este autor, a partir de determinados rasgos de las organizaciones hoy en día, algunos criterios de organización y gestión, acudiendo a la antropología y haciendo una comparación entre lo sucedido con la civilización Maya y los Apaches en los Estados Unidos y contrastándolo con las organizaciones hoy en día. En resumen, trata la dimensión de la centralización – descentralización de las organizaciones actuales.
B) Viviendo CON las organizaciones del siglo XXI:
- Énfasis en el bienestar humano, la relación de la gente con el negocio es clave en la convivencia y la cooperación. Se inicia así el surgimiento de la metáfora del ecosistema humano en las organizaciones, la restauración de los equilibrios que sostiene Ventocilla (2006)
- La agenda para las organizaciones: - Reconectar la Teoría de la organización a los problemas críticos que enfrenta el mundo.
- Reflexionar y cuestionar nuestros valores como investigadores, académicos y profesionales. (Echeverría. 2009)
- Estudiar cómo las organizaciones alivian los problemas globales; lo cual nos hará retar y abandonar métodos de investigación.
Los elementos de su enfoque son: El cambio organizacional, el contexto organizacional y las prácticas de la gerencia.
La problemática que plantea en el campo de la teoría de la organización hace referencia al impacto de la tecnología de comunicación e información, la automatización de procesos; así como el surgimiento de nuevos sectores: biotecnología, nanotecnología, energías alternativas-
El entendimiento organizacional entonces, amerita comprender (grasp) la conexión entre la creatividad y su materialización en las organizaciones.
Un segundo enfoque es el de los autores Grandori y Soda (2006), quienes elaboran una propuesta discreta de organización para solventar problemas y entiende a las organizaciones como un conjunto de actividades, se fundamenta en la experiencia observada antes que el desarrollo de criterios.
Su enfoque es de tipo económico – racional, considerando el criterio de la escogencia o decisiones basadas en la reducción de costos de información. Uno de los problemas clave es la escasez de recursos y el grado de incertidumbre organizacional.
Para Castells (2006), las organizaciones han sido impactadas por la nueva revolución de la tecnología de información y comunicación. Existe un tránsito, un desplazamiento de la sociedad postindustrial a la sociedad informacional; sosteniendo que el capitalismo ha sufrido un proceso de reestructuración caracterizado por una mayor flexibilidad en la gestión; la descentralización e interconexión de las empresas, tanto interna como en su relación con los otros; un aumento del capital frente al trabajo con el declive del movimiento sindical.
La organización es un sistema específico de recursos que se orientan a la realización de metas específicas. Por lo que las instituciones son las organizaciones envestidas con la autoridad necesaria para realizar ciertas tareas específicas en nombre del conjunto de la sociedad.
La tesis del autor es que el ascenso de la economía informacional se caracteriza por el desarrollo de una nueva lógica organizativa que está relacionada con el proceso actual de cambio tecnológico, pero que no depende de él.
Existen tres (3) trayectorias fundamentales en el modelo del autor:
a.- El cambio tecnológico ha sucedido en las siguientes etapas:
-El fordismo,
- El industrialismo,
- El postindustrialismo y
La sociedad informacional.
Mullins y Rhodes (2007) definen la red como un conjunto de nodos interconectados, lo que un nodo es concretamente depende del tipo de redes. Por ejemplo:
- Los mercados de la bolsa,
- El Consejo Nacional de Ministro y otros por el estilo.
En consecuencia, la empresa red es aquella forma específica de empresa cuyo sistema de medios está constituido por la interacción de segmentos autónomos de sistemas de fines.
Observa las siguientes tendencias:
- La transición de la producción en serie a la producción flexible
- Crisis del modelo de organización tradicional basada en la integración vertical y la gestión funcional jerárquica
Precisamente, su concepción es que la nueva lógica de la interconexión y la consistencia o el grado de interés entre los fines de la red y sus componentes es lo que define la empresa red.
Claves de la nueva economía y su alcance en las redes
Autores como, Drucker (1989), Omahe (1991), Martínez (1993), Cornella (1994), Lanz (1992), Capra (1996), Castells (2006), apuntaban al necesario emerger de un nuevo paradigma, fundamentalmente a un nuevo enfoque y a una nueva manera de pensar para abordar las nuevas realidades. De acuerdo al derribamiento / apertura de los mercados, la intensificación de la utilización de la tecnología y de la información en todos los aspectos de la producción; en consecuencia, la información y el conocimiento se han convertido en un bien de capital y similar a la mano de obra, los materiales y los recursos financieros. Más aún, el trabajo intelectual es entonces, uno de los principales generadores de bien estar en el mundo actuar y labores como el saber, el enseñar y el aprender son actividades clave en el mundo actual.
Productividad de los trabajadores del conocimiento:
La TIC es la herramienta principal para obtener las ganancias sustanciales y progresivas de la productividad que modelarán los líderes del siglo XXI (Drucker, 1986). Las empresas revisarán sus estructuras de costos utilizando: captura de datos en la fuente; procesamiento integrado de transacciones, intercambio electrónico de datos, los sistemas en tiempo real, el apoyo para la toma de decisiones en línea, los sistemas de administración de documentos. Los sistemas expertos y la simulación dinámica en ambientes interactivos.
Calidad:
La calidad en la distribución y entrega de los productos y servicios es clave debido a la naturaleza integrada al proceso de producción. Los programas de calidad están dirigidos a los trabajadores del conocimiento. La calidad incluye nociones de consistencia, motivación al empleado, compromiso del proveedor, incorporación del canal emocional en hacerlo siempre mejor.
Agilidad / Resilencia:
Otro desafío organizacional es la capacidad de reaccionar / responder con rapidez a las condiciones cambiantes del mercado global; así como a la conservación del ambiente y exigencia de los clientes. El tiempo de innovación para entregar nuevos productos y servicios se ha reducido de una manera drástica.
Globalización:
Esto ha implicado la realización de fusiones, adquisiciones y alianzas para obtener conocimiento y presencia en el mercado. También una disminución en la capacidad de los gobiernos nacionales para proteger industrias ineficientes.
Suministro Externo:
Se está vivenciando el resurgimiento por el suministro externo de ciertos aspectos de la producción, ventas, servicios y funciones de apoyo. El interés se centra en los recursos de una organización para suministrar valor agregado, y no en disipar la atención de estas áreas sobrecargando sus capacidades de organización.
Responsabilidad social y ambiental:
Las organizaciones en la actualidad deben actuar con responsabilidad en cuanto a sus relaciones con los demás; así como en la comunidad en la cual desarrolla sus operaciones, Méndez (2004), Gómez (2005), Guédez (2006). Hay una tendencia en auge en que los clientes desean adquirir bienes y servicios de aquellas organizaciones y empresas que sean éticas, moralmente, ecológicamente y socialmente responsable con una orientación más bien hacia el compromiso social Francés. (2008)
Asociación:
La organización se extiende, con base a nuevos tipos de relaciones con los proveedores, clientes, grupos afines e incluso competidores. Es el concepto del trabajo en redes en el intercambio y transacciones del conocimiento; así como las redes de innovación. Es así que la autora Carosio y Valera (2008) definen a la red como una estructura abierta compuesta por un conjunto de interconexiones y relaciones entre entidades que pueden ser sociales o de otra naturaleza.
En igual forma en el conocimiento de los mecanismos intercambio entre distintos actores clave que participan en los procesos de generación de nuevos conocimientos; así como en los que participan en los proceso de innovación, tanto en las empresas, como en el conjunto de actores presentes y que forman parte del sector de ciencia y tecnología, enmarcados en el enfoque de los Sistemas Nacionales de Innovación (Freeman, 1995; Pérez, 2008; Lundvall, 2005; Dhanaraj y Parkhe, 2006; Centro de Estudios Tomillo, 2002)
Resumiendo el enfoque del autor Tapscott (1995), la nueva empresa que propone este autor es la denominada “Organización Abierta e Interconectada” (OAI), como un conjunto de características, condiciones y factores a considerar desde un antes y un después. Son como los criterios guías propuestos por la autora Pérez (2000), entre los que destacan como dimensiones y factores de n modelo tradicional y uno que está emergiendo, como por ejemplo, la superioridad moderna de la organización en redes flexibles en la que las diversas instituciones la irán adoptando, una tras otra e irán adaptando sus especificidades.
Es así que el Tapscott (1995) propuso sus criterios guías con las siguientes características:
Organizaciones abiertas Interconectadas ANTES y AHORA
1.- Estructura: Jerarquía AHORA Interconectada
2.- Alcance: Interna / cerrada AHORA Externa / abierta
3.- Recurso principal: Capital AHORA Personas/información
4.- Estado: Estable AHORA Dinámico
5.- Personas: Directores AHORA Profesionales
7.- Dirección: Control AHORA Autoadministración
8.- Bases de acción: Control AHORA Facultamiento
9.- Motivación individual: Satisfacer superiores AHORA Logros en equipo
10.- Aprendizaje: Específico AHORA Multihabilidades
11.-Base de compensación: Cargo AHORA jerarquía Compromiso
12.- Relación: Competitiva AHORA Cooperativa
13.- Actitud: Indiferencia AHORA Identificación
14.- Exigencias principales: Administración dominante AHORA Liderazgo
15.- Motivador clave: Premio-castigo AHORA Compromiso - Engagement - Confianza
Orientado bajo este esquema de pensamiento, el autor Capra (1996) plantea el enfoque del paradigma de la visión holística del mundo, llamada también, la visión ecológica que incluye la conexión de los sistemas vivos con el entorno natural.
Esta aproximación se basa en la línea de pensamiento de la ecología profunda; la cual ve al mundo como una red de fenómenos interconectados e interdependientes.
Este autor afirma que este cambio de paradigma requiere una expansión de nuestras percepciones y valores, entre los que caben destacar:
Características en el pensamiento y valores
PENSAMIENTO / VALORES
Pensamiento: Lineal a No lineal Valor de Dominación a la asociación
Pensamiento: Racional a Intuitivo Valor de Expansión a la conservación
Pensamiento: Analítico a Sintético Valor de Competencia a la cooperación
Pensamiento: Reduccionista a Holístico Valor: Continuidad a la calidad
Pensamiento: Estructural a social Valor: Jerarquía a las Alianzas / al trabajo en red
4.0. Una propuesta educativa: Proyecto TEBAS – Universidad Centrel de Venezuela: " La casa que vence las sombras"
Cuando se reflexiona sobre la educación, las soluciones están más allá del corto plazo, es una tránsito que va desde construir claros propósitos en un contexto sociopolítico y cultural que le brinde las condiciones de viabilidad (capacidad de perdurar en el tiempo), hasta lograr una alineación entre lo que se necesita prioritariamente y lo que se está formando a nivel educativo.
Ante la trascendente transformación tecnológica y económica, la pedagogía y los enfoques educativos están cambiando su rol y la manera como se imparte y se alinean las necesidades de formación de los países; los cuales, están orientados hacia un desarrollo socioeconómico sustentable; en este sentido, se proponen los siguientes temas de abordaje educativo:
Elevar la calidad de la enseñanza
Fortalecer y expandir lo mejor de nuestros proyectos educativos: Como por ejemplo: Proyecto TEBAS – Proyecto educativo Fe y Alegría – El Sistema de Orquestas Sinfónicas Infantiles del profesor José Antonio Abreu. Ver: http://www.laphil.com/yola
Mejorar la transición de la escuela al trabajo
Ajustar el contenido de la educación secundaria dotando a los jóvenes con el conocimiento y valores para una participación productiva y social.
Diversificar y transformar la educación universitaria
Elevar la calidad y centrarnos más en el aumento de la eficiencia en el uso de los recursos, que en el financiamiento
Fortalecer el rol del sector privado en el financiamiento y la gestión de proyectos de investigación y desarrollo productivos / emprendimientos, en conjunto.
Descentralizar
Rediseñar las instituciones básicas: Ministerio Popular para el Sector de Educación Básica y el Ministerio para la Educación Superior.
Desarrollar y poner a disposición pública con información que haga posible la rendición de cuentas e instrumentar mejoras.
Enfocar la formación educativa técnico, tecnólogos y profesional hacia las necesidades prioritarias del país.
Diversos son los proyectos educativos exitosos; sin embargo, para un efecto a mediano y largo plazo y ajustado con este nuevo contexto de la sociedad de la información y en atención a un enfoque del desarrollo socioeconómico del país, consideramos necesario sostener que el desarrollo económico independiente es posible mediante la movilización de nuestros propios recursos internos y, en casos excepcionales, apelando al concurso del capital internacional, pero siempre que su inversión se efectúe bajo elk control y dirección del Estado. (De la Plaza, 1958)
Es en este sentido en el que uno de los proyectos que, en opinión del autor de este ensayo es el que inició el profesor Esté (2006), el cual lo denominó Proyecto Educación para la Dignidad; el cual se sustenta en los siguientes cuatro / (4) principios:
a.- Dignidad
b.- Interacción constructiva
c.- Cohesión
d.- Pertinencia de los aprendizajes
DIGNIDAD.- La dignidad atiende a la verificación del hombre como sujeto, capaz de comprender, conocer, crear, concebir empresas y realizarlas. La dignidad no se logra desde prédicas o dádivas, sino en el ejercicio, en las búsquedas y logros, en la contratación y el juego social, en la angustia, la problematización y en la superación de las pruebas y problemas.
INTERACCIÓN COSNTRUCTIVA.- El conocimiento, el saber, la comprensión son logrados en procesos constructivos del sujeto, que se activan en la negociación e interacción con los otros sujetos (implica la sesión la inserción social de las propias construcciones, se convalidan en ellas), con las cosas (sean materiales, sígnicas o simbólicas) y consigo mismo.
COHESIÓN.- Una comunidad cohesionada puede construir y producir sus propios proyectos, gracias a que el grupo humano que la compone existe como grupo real; es decir, que tiene la capacidad de negociar y crear las pautas que permitan solventar las necesidades que se les presente. La cohesión en una comunidad se traduce en claridad de propósitos y fuerza que le impulsa a la consecusión de los mismos.
PERTINENCIA DE LOS APRENDIZAJES.- Es definida en función de la validez que tenga un saber, acción, habilidad o destreza para el logro de un fin propuesto.
5.0. Conclusiones
A continuación tres (3) reflexiones sobre lo que deja este trabajo a través de las concepciones intelectualista de la educación, la necesidad de unificación de criterios en cuanto a la formación en investigación y desarrollo científica y tecnológica y lo que sería el reforzamiento y consolidación para una educación con dignidad.
En primer lugar, una reflexión en base a los datos presentados, dan cuenta de la ausencia de una alineación con lo estipulado en la Plan Nacional de Ciencia y Tecnología, por un lado y por otro, aún podría decirse que la alineación, la sincronización de la demanda de trabajo por parte de los egresados del sector educativo universitario y la oferta de trabajo tanto del sector productivo y público es necesario. Es la opinión del autor del presente ensayo que todavía está inconclusa la cooperación entre los sectores que conforman el Sistema Nacional de Innovación
El cambio paradigmático a que conlleva el proceso de transformaciones en las que nos encontramos inmersos actualmente, tiene importantes implicaciones que deben ser consideradas por la universidad en su proceso de reforma. Estas son de cuatro tipos:
1. Axiológicas, en tanto que supone el surgimiento de una nueva escala de valores que reivindique la necesidad de la convivencia humana en un mundo de solidaridad, bienestar social y paz.
2. Epistemológicas, en el sentido de la consideración de nuevas formas de producir el conocimiento, distintas a las del modelo clásico legado por la modernidad.
3. Ontológicas, en cuanto a la concepción del tipo de hombre que demandan los nuevos tiempos, el cual debería tener algunas de las siguientes características: una visión sistémica de la realidad (todo está relacionado con todo), la posibilidad de pensar globalmente y actuar localmente, capacidad autocrítica, autogestionario, con habilidad para aprender permanentemente, posibilidad de combinar el pensamiento lógico con la creatividad, capacidad para transferir lo aprendido, pensamiento imaginativo y visualización, control emocional y comunicación generativa.
4. Gerenciales, en el sentido del desarrollo de un nuevo paradigma empresarial fundamentado en el aprendizaje organizacional, el conocimiento como el principal recurso que agrega valor al sistema productivo, la competitividad y la cooperación mutua. Estos cambios exigen no sólo adaptarse a una nueva situación, sino prepararse para vivir en un equilibrio inestable; es decir, en un proceso de adaptación permanente a las exigencias de un entorno cambiante y caótico.
En segundo lugar, la meta del Estado de construir el bienestar colectivo a través de la humanización de los procesos científicos, tecnológicos e industriales, acarrea nuevos retos, los cuales, deberán sumarse a los reconocidos avances y logros alcanzados por Venezuela en esta materia, donde lo primordial ahora es lograr una sinergia entre el pueblo, la ciencia y la tecnología, históricamente desvinculados, a consecuencia de un pensamiento que colocaba estos renglones como elites e inalcanzables para el común denominador.
En tercer lugar, estamos de acuerdo con el profesor Zambrano (2000), en que todos esperamos que existan y se concreten las conexiones entre la economía, el desarrollo humano y la educación; sin embargo, estas relaciones no son automáticas. La profundidad y fortaleza de las vinculaciones dependen de factores tales como: la estructura de la economía, la manera como se distribuyen los activos, el nivel de del capital social acumulado, la eficiencia del sistema político en cuanto a espacio de negociación distributiva y fijación de prioridades públicas, la eficiencia con la que se gestiona la política económica e , incluso, el nivel de moralidad pública que tanto afecta al buen funcionamiento del Estado y sus canales distributivos.
Bibliografía consultada
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