Parque Mochima. Estado Anzoateguí- Venezuela

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La hora en Caracas - Venezuela

miércoles, 22 de septiembre de 2010

José Antonio López Cerezo: ‘La cultura científica tiene un extraordinario valor práctico para mejorar la vida de las personas’

Saludos innovadores!


A continuación les copiamos una interesante entrevista realizada por Giorgina de Diego (OEI-AECID) al Dr. López Cerezo sobre la importancia de la cultura científica. 


José Antonio López Cerezo es catedrático en Lógica y Filosofía de la Ciencia en la Universidad de Oviedo. Entre otras actividades profesionales dedicadas a la ciencia, la cultura, sociedad y la educación, coordina el Máster Oficial de Estudios Sociales de la Ciencia en el que imparte un seminario sobre Cultura Científica.  Se trata de uno de los investigadores más destacados del ámbito iberoamericano con un amplio reconocimiento en la vanguardia de la investigación mundial en temas de Ciencia, Tecnología y Sociedad que ha tenido una influencia decisiva en el impacto que el enfoque CTS ha tenido en Iberoamérica.


Pregunta: ¿Cuál es la necesidad de desarrollo de la cultura científica en Iberoamérica hoy en día?


Un lugar común de nuestros días es la importancia del recurso del conocimiento para el desarrollo económico y social. De ese recurso dependen no solamente el crecimiento económico y la competitividad, sino también otros elementos que son fundamentales para el bienestar de las sociedades y no se expresan en el mercado, como la conservación del entorno, un buen sistema público de salud o la educación de calidad. 


En ese sentido, creo que una de las principales prioridades de la región es fortalecer los sistemas de ciencia y tecnología de los países, no solamente mediante un mayor esfuerzo nacional sino también mediante la cooperación. Dicho esto, quiero también añadir que la ciencia y la tecnología no acaban en el laboratorio. Tienen continuidad en la empresa, en la escuela y en la sociedad. Sin interés por la ciencia en la población, sin oportunidades de aprendizaje en los medios, sin una presencia importante de las ciencias en la educación reglada, sin aprecio por la profesión científica, sin consumo de información científica, sin un nivel adecuado de alfabetización en ciencia entre los ciudadanos, etc., sin estas cosas un sistema de ciencia y tecnología se convierte en una isla que languidece y no tiene otra opción más que debilitarse continuamente. La buena salud de un sistema de ciencia y tecnología depende crucialmente de las vocaciones científicas que seamos capaces de generar en los jóvenes, del aprecio y respaldo de la población, que haga más improbables los recortes políticos en tiempos de dificultad, de la sensibilización de gestores y empresarios y la creación de una cultura de la innovación. Pero además, la cultura científica tiene un extraordinario valor práctico para mejorar la vida de las personas, en tanto que consumidores o usuarios de productos y artefactos técnicos, en el supermercado o en el hospital, o en tanto que profesionales que pueden hacer uso de la información especializada para obtener mejoras laborales. 


Tiene también la cultura científica un gran valor para la maduración democrática de los ciudadanos, dada la presencia ubicua de la ciencia en todos los ámbitos de la vida, pues sus oportunidades de formarse una opinión e implicarse en asuntos de interés general dependen cada vez en mayor medida de su familiaridad con la ciencia. Y, por último, no podemos olvidar el valor intrínseco de la cultura científica para las personas. Nos hace mejores personas. La experiencia de un joven que descubre asombrado la belleza de una demostración matemática, la sobria elegancia de una ley física o la exquisita armonía del funcionamiento del cuerpo humano, es una experiencia que nos enriquece enormemente y potencia lo mejor de cada uno.


P: ¿Qué experiencias  conoce que destaquen en el buen desarrollo de la cultura científica?


La cultura científica no es el simple resultado de la divulgación de la ciencia. Es un fenómeno multidimensional complejo, que, en ese mismo sentido, puede expresarse en una diversidad de planos y generar diversos tipos de experiencias. En primer lugar podemos mencionar la cultura científica “escolar”, saber por ejemplo que el centro de la Tierra está muy caliente o que los antibióticos no son efectivos con los virus. Este tipo de cultura se expresa como alfabetización científico-técnica y un indicador es la capacidad de comprensión de suplementos científicos de diarios. También cabe destacar una cultura científica crítica que es la base de la reflexión y hace posible entender el alcance político, económico o las implicaciones éticas de las noticias en la vanguardia del desarrollo científico-tecnológico. Por ejemplo, saber qué está en cuestión en el tema del calentamiento global o los alimentos transgénicos. A continuación puede destacarse una cultura científica práctica, que se expresa en la utilización del conocimiento científico en la vida diaria de las personas como consumidores de artículos, como usuarios de sistemas de transporte o de salud, etc. Debemos ser conscientes de que vivimos completamente rodeados de productos y sistemas científico-técnicos, y de que una buena parte de la información que manejamos ordinariamente para tomar cualquier clase de decisión es información científica o técnica (sobre proteínas, calorías, watios, riesgos de sustancias diversas, programas de ordenador, interferencias electromagnéticas, etc.). 


Y, por último, puede también mencionarse una cultura científica cívica, en la que la apropiación individual del conocimiento científico genera una implicación en la vida social de la comunidad a través de experiencias de participación. Por ejemplo, cuando enviamos una carta al director de un diario, convocamos una reunión de vecinos, vamos a un juzgado a poner una denuncia, o convencemos a los amigos respecto a evitar el consumo de cierto tipo de productos, en respuesta a un riesgo potencial derivado de un producto tecnológico, una instalación industrial o una obra pública. A esto último me refería cuando hablaba de la cultura científica como instrumento de maduración democrática para las personas.


P: ¿Por qué genera conflictos sociales en determinados contextos?


No creo que la cultura científica genere conflictos por sí misma. La cultura científica es más bien un recurso, un instrumento que hace posible que ciertos conflictos sociales aparezcan o se manifiesten de ciertas formas. Pero el origen de esos conflictos es en mi opinión de naturaleza política. Una población ignorante se inhibirá ante un proyecto tecnológico que pueda generar un riesgo, o bien, debido a su posicionamiento político, se dejará llevar ciegamente por el grupo de interés que critique y presente batalla a ese proyecto. Ser científicamente cultos nos hace más capaces y menos manipulables. Es esa capacidad, ese “empoderamiento” que induce la cultura científica en las personas, el que utilizamos para reconocer y valorar un riesgo que ha generado otro actor social por acción o por omisión -la administración pública o una empresa, por ejemplo-, y de este modo tomar una decisión bien fundamentada acerca de cómo proceder. De otro modo nos quedamos al margen de la participación o, si finalmente nos involucramos, nos convertimos en rehenes de un grupo de presión en lo que suele convertirse en una dinámica ciega de enfrentamiento político. La cultura científica nos permite ser protagonistas en conflictos sociales relacionados con aplicaciones del conocimiento científico o desarrollos tecnológicos, y una proporción de asuntos generales cada vez mayor está relacionada con la ciencia y la tecnología. Quiero además añadir que los conflictos sociales no son negativos; son la pauta natural de una sociedad democrática saludable. La acción de los agentes sociales, en la búsqueda legítima del beneficio propio, genera con frecuencia riesgos potenciales o efectos negativos para la salud, economía o bienestar de otros agentes sociales. De ahí el conflicto. Pero no es ni inusual ni disfuncional. Para encauzar adecuadamente esos conflictos están los poderes del Estado en una sociedad democrática, mediante las leyes y la aplicación de las leyes. Una sociedad sin conflictos es una sociedad que reprime o esconde el disenso, es un tipo de sociedad que muchos recordamos y creo que ninguno queremos volver a vivir.


P: ¿Qué importancia real le da la población a la cultura científica? ¿Cuál es su nivel de conciencia?


La importancia que le concede la población a la cultura científica depende de lo que entendamos por cultura científica, y también de la población a la que hagamos referencia. Una encuesta reciente, de otoño de 2007, ofrece datos interesantes sobre los ciudadanos iberoamericanos.


Se trata de una macroencuesta sobre percepción social de la ciencia y cultura científica promovida por la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) y la Red Iberoamericanos de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT), y pasada en las ciudades de Buenos Aires, Bogotá, Caracas, Madrid, Panamá, Santiago de Chile y Sao Paulo. De acuerdo con esta encuesta, que ofrece datos análogos a los de las correspondientes encuestas nacionales, los habitantes de las grandes urbes de Iberoamérica no tienen un gran interés por los temas de ciencia y tecnología. 
A este desinterés acompaña lógicamente un consumo muy bajo de este tipo de temas, en una población que se informa mayoritariamente a través de la televisión. Sin embargo, si entendemos la cultura científica de un modo un poco más amplio, no como cultura escolar sino como cultura crítica y práctica, e incluimos en los temas de ciencia no solamente descubrimientos científicos e inventos, sino también los temas de alimentación, salud, medio ambiente y medicina, entonces el interés como el consumo es mucho mayor y se acerca más a los temas estrella habituales (deportes, economía, espectáculos, etc.). Es también destacable, siguiendo esa encuesta, la alta valoración que dan los ciudadanos del potencial de la ciencia y la tecnología para transformar nuestras condiciones de vida, para bien o para mal. Al respecto, la percepción mayoritaria es claramente positiva, aunque hay una proporción importante de la población, superior al 40%, que considera que el desarrollo científico y tecnológico no sólo es fuente de muchos o bastantes beneficios sino también de muchos o bastantes riesgos. Sobre esta base, es lógico que esas mismas personas se hayan expresado mayoritariamente en esa misma encuesta a favor de la participación ciudadana en asuntos públicos relacionados con la ciencia o la tecnología. 


Cabe destacar que esa encuesta incluyó dos bloques de preguntas específicas sobre participación ciudadana en materia de ciencia y tecnología, como personas afectadas o simplemente interesadas en aplicaciones de la ciencia o instalaciones tecnológicas que puedan suponer un cierto impacto económico, para la salud o el medio ambiente. Aunque hubo diferencias significativas entre ciudades, con una mayor inclinación general a la participación en Buenos Aires y Panamá, en general la mayoría de los entrevistados se expresó con claridad a favor de tener cierta capacidad de influencia y oportunidades de participación en esta clase de temas. Creo que son resultados muy interesantes, pues no sólo contribuyen a perfilar una cierta dimensión política de la cultura científica, sino también muestran vías de acción para las políticas públicas en la materia.


P: ¿Hay algún dato sorprendente en el estudio de percepción de la ciencia y la tecnología? ¿Algún dato alarmante que cree justifique más aún la necesidad de desarrollo de la cultura científica?


Tomando como fuente documental esa misma encuesta, sí creo que hay algunos datos inquietantes que justifican una atención especial. En la posterior explotación de resultados, y utilizando programas estadísticos de análisis multivariante, se detectó un grupo poblacional con un muy fuerte distanciamiento respecto de la ciencia. Este grupo, que reúne a casi un cuarto de la población encuestada, no se interesa por la información científica ni la consume, tiene una marcada visión negativa de la ciencia y la tecnología, no atribuyen utilidad al conocimiento científico y es indiferente respecto a cuestiones de participación. Es un grupo que está muy distribuido por las diferentes ciudades, aunque en él tiene un peso especial la población con una escolaridad baja. Es un trabajo estadístico que coordinó Montaña Cámara, de la Facultad de Farmacia en la Universidad Complutense de Madrid. La mera existencia de este grupo poblacional señala un desafío político, pero también muestra la estrecha dependencia de la cultura científica de una población respecto a la calidad y fortaleza de su sistema educativo. Mejorar la cultura científica de una sociedad no requiere únicamente multiplicar la oferta de información científica en los medios y espacios de comunicación social (como periódicos, televisión o museos de ciencia), requiere asimismo dar una mayor presencia a las ciencias en la educación reglada, mejorar las estrategias de enseñaza-aprendizaje y, en general, centrar los esfuerzos en la mejora de la educación de los jóvenes. En todas las encuestas aparece una estrecha asociación positiva entre nivel de escolaridad alcanzado y nivel de interés y consumo de información científica.


P: ¿Cuáles cree que son los límites de la ciencia en su divulgación?


Más que de límites me gustaría hablar de oportunidades. Señalar oportunidades es también indicar límites y carencias, pero centrando el discurso en el lado positivo. De un modo habitual, podemos entender la divulgación científica como un proceso de transferencia de conocimiento, desde un polo productor de conocimiento (los científicos), pasando por un medio que traslada un mensaje (los medios de comunicación con sus profesionales), hasta un polo receptor de conocimiento (los ciudadanos). Tomando en consideración estas dimensiones, hay oportunidades de mejora en cada eslabón del proceso e incluso en la modificación de la estructura del propio proceso. Por señalar solamente algunos de esos retos, con respecto a los científicos que trabajan y producen resultados que pueden alimentar una mejor y más intensa divulgación, hay deficiencias muy claras. 


Hay, por ejemplo, una falta de incentivos curriculares a la divulgación, y esta llega incluso a ser un demérito en muchas áreas de conocimiento. No es infrecuente el profesor universitario que tiene que eliminar las entradas de divulgación en su currículum cuando prepara este para un concurso o una oposición, anticipando un tribunal poco receptivo a esa clase de actividades. Otra deficiencia tiene que ver con la rendición de cuentas de los resultados de la investigación. Con mucha frecuencia, las convocatorias de financiación de proyectos de investigación con fondos públicos no demandan más que la rendición final de cuentas ante los pares científicos, no ante los “impares”, es decir, los ciudadanos que no llegan a saber qué se está haciendo con el dinero de sus impuestos. Si nos centramos ahora en la dimensión de la mediación, que es responsabilidad de los periodistas y profesionales de la comunicación de la ciencia, creo que hay un cierto déficit de profesionales preparados para realizar esa tarea satisfactoriamente. La ciencia que encontramos habitualmente en los medios es una ciencia ahistórica, triunfalista y descontextualizada; es una ciencia donde el lado humano, los aspectos políticos o los dilemas éticos suelen estar ausentes. Es una divulgación que se preocupa por la actualización científica, procedente por ejemplo de revistas como Science o Nature, pero no de la actualización metacientífica de una imagen académica de la ciencia ya caduca y poco ajustada a la realidad. 


En este sentido, creo muy positiva una mayor presencia de la filosofía, la historia y la sociología de la ciencia en los programas formativos de periodistas científicos y profesionales de la divulgación. En relación a lo anterior, pero también debido a motivos estructurales propios del mundo de la comunicación, hay una cierta falta de espíritu crítico y una tendencia al sobredimensionamiento en la comunicación de noticias científicas. Un ejemplo, entre muchos, son los proyectos hoteleros en la luna (Hilton), recogidos en los medios tras el anuncio del descubrimiento de barro congelado en los casquetes polares lunares, o las espectaculares promesas de cura de enfermedades que se asocian cada poco tiempo con pequeños avances en genética o bioquímica, y que pronto pasan al olvido y van alimentado la incredulidad pública. En los casos donde se recoge críticamente una noticia es cuando existe un mercado específico asociado a la crítica, como en la utilización comercial de los organismos genéticamente modificados o la investigación con células madre embrionarias, consiguiendo en estos casos más bien amplificar públicamente la cuestión e incluso tematizarla políticamente por el efecto “bola de nieve”. 


Por último, con respecto al polo de la apropiación social, hay una falta de estímulos y motivación ciudadana respecto a la apropiación de conocimiento científico y tecnológico, debido en parte al menos, a los factores anteriores. Este creo que es el caso particular de los países iberoamericanos, unos países donde además existe una estrecha asociación de la cultura -y las personas cultivadas- con la cultura artística y literaria, contribuyendo así al desinterés por la ciencia. Creo también que hay vías de mejora si repensamos mejor el propio proceso de comunicación social de la ciencia. Los ciudadanos, en este proceso, no pueden ser vistos como meros receptores pasivos de contenidos científico-técnicos. Tienen intereses y actitudes, y también son portadores de otros tipos de saber; tienen unas especificidades que con frecuencia no son tenidas en cuenta por aquellos que producen ciencia y por aquellos que la trasmiten. Más producción de conocimiento científico, mayor oferta en los medios, no significa inexorablemente más apropiación de la ciencia. El desinterés y la desconfianza pueden conducir al fracaso. 


No hay que olvidar que los dos motivos más frecuentemente aducidos por los ciudadanos en las encuestas, en respuesta a la pregunta por su falta de inclinación por la ciencia, son que no la entienden y que no les interesa. Sin duda, algo estamos haciendo mal. Y la reacción, desde luego, no puede limitarse a mejorar la presencia de la ciencia en medios y museos, por importante que sea, hay también que actuar en las escuelas, en los sistemas de ciencia y tecnología, y reorientar las actuaciones de forma que los ciudadanos dejen de ser concebidos como científicos o ingenieros subdesarrollados, como meros sujetos pasivos con un déficit de información y actitudes.


Fuente: http://www.oei.es/divulgacioncientifica/entrevistas_122.htm

Hasta pronto!

 

lunes, 20 de septiembre de 2010

Los fines de ciencia y los focos de atención como país

Pablo Lira apreciando desde el Faro Holandés en el Archipiélago El Gran Roque
Los Roques - Venezuela 

Saludos innovadores!!

Luego de un buen rato de leer textos, papers de alto nivel, artículos de opinión de `personas cuyos aportes han sido valiosos para la comprensión y entendimiento sobre la crisis, valores y utilidades de la ciencia y la tecnología, les comento que me encuentro  aun viendo lo que queda de la copa; es decir, las oportunidades en un contexto de acciones contradictorias, dialógicas en un marco de preeminencia hacia lo político.
Ya nos decía el profesor Varsavsky  (2006), la ciencia mundial es ideológica..” cada tipo de sociedad requiere de un estilo de ciencia propio, diferente por su contenido, sus problemas  prioritarios, sus métodos de investigación y sus criterios prácticos de verdad, tanto como por las características sociológicas del grupo de los investigadores” (p. 1)

Desde ya, esta óptica la ciencia se enmarca desde un foco de autonomía científica como país. Es decir, un proyecto propio desde una política científica,  dirigida a una autonomía científica y tecnológica. Lo político como previo al desarrollo científico. Esta opción, en la República Bolivariana de Venezuela, fue adoptada y concretada en las Líneas Generales del Plan de Desarrollo  Económico y Social de la Nación para el período 2007-2013: El Modelo Productivo Socialista, entre cuyos objetivos se encuentra:

1.0. Rediseñar y estructurar el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SNCTI). 
Los objetivos señalados para este rediseño y estructuración son:
1.1. Fortalecer centros de investigación y desarrollo en las regiones.
1.2. Apoyar y fortalecer la prosecución de carreras científicas y postgrados y garantizar el mejoramiento de los docentes.
1.3. Apoyar la conformación de las redes científicas  nacionales, regionales e internacionales privilegiando las prioridades del país.
1.4. Generar vínculos entre los investigadores universitarios y las unidades de investigación de las empresas productivas.
1.5. Identificar los retornos de los resultados de las investigaciones, a través de indicadores que consideren el impacto en la solución de problemas.
1.6. Crear y aplicar contenidos programáticos para el uso de tecnologías de información y comunicación.

2.0. Incrementar la cultura científica.
2.1. Programar y aplicar incentivos hacia las propuestas innovadoras de los grupos excluidos.
2.2.  Crear seguridad social y estímulo para los jóvenes que se dediquen a la investigación.
2.3. Crear sistemas de evaluación, certificación, promoción y divulgación de los hallazgos e innovaciones.
2.4. Potenciar redes de conocimiento y de capacitación para el trabajo en todos los niveles educativos.
2.5. Identificar y utilizar las fortalezas del talento humano nacional.
2.6. Crear plataformas tecnológicas para el acceso del ciudadano común.
3.0. Mejorar el apoyo institucional para la ciencia, la tecnología y la innovación.
3.1. Simplificar los trámites para la obtención de patentes y reducir costos.
3.2. Vincular las potencialidades humanas con las necesidades nacionales y regionales.
3.3. Garantizar la distribución generalizada de tecnología de la información y la comunicación en todo el territorio nacional.
3.4. Divulgar y adoptar las normas de calidad internacional que permitan ofrecer propuestas competitivas.
3.5. Actualizar el banco de patentes y modernización de los sistemas de información.
3.6. Divulgar los resultados de los esfuerzos de innovación para lograr visibilidad, impacto y estímulo.

Hilando fino, como dicen por aquí  (analizando lo anterior con profundidad), uno pudiera hasta decir: Un gran reto como país y considerar la alineación política y de coordinación de acciones desde el Estado dirigidos a materializar los objetivos señalados solamente para la ciencia y tecnología (CYT). No obstante, debe considerarse el tiempo y el momento para la consolidación política e ideológica para  la estabilización y arranque de las propuestas. Sin embargo, desde la postura del autor Echeverría (2003), la  concepción de la CYT adoptada en que considera la ciencia más allá de la búsqueda de valores de la verdad, la objetividad, sino más bien, políticos, sociales y de prestigio mundial como país dirigido a la independencia o autonomía científica.

Ahora bien, uno se encuentra que aparte de toda la resistencia (si uno lo ve por ese lado) o de ponerse a tono con la fortaleza de la superación y competitividad con las fuerzas, instituciones y empresas de ciencia y tecnología de escala global; así como los países del hemisferio norte, entonces, el trabajo interno de construcción de fortalezas o capacidades en lo  social, intelectual, la excelencia, cultural, son clave para que desde lo endógeno se instile esa cultura científica; así como de aquellos valores y competencias en el talento humano deberá ser sinérgico y alineado como el rayo laser para ir logrando escalar niveles progresivos de autonomía en CYT.

Uno de las áreas de fortalecimiento para trabajarlas y potenciarlas hace referencia al desarrollo y consolidación de las redes de conocimiento científico, redes de innovación socio-productiva como esquemas articulados y vinculados entre los distintos actores del quehacer económico, académico y productivo.
Cuando decía de los aspectos contradictorios hago referencia por ejemplo, a las opiniones de personas clave que indican la desestimación y desmontaje de programas como la Misión Ciencia, o el Instituto de Altos Estudios Estratégicos. Por otro lado, analizando los planteamientos del autor Miró (2001) uno se encuentra con argumentos que nos llama a reflexión; por ejemplo, el modo de ser económico del venezolano, su cultura económica y laboral, muchas de nuestras conductas nos llevan a vivir el día y no complicarse mucho la vida, a no superarnos, a conformarnos con poco. Ello se ha visto que se traslada al trabajo. Quiero dejar una sola de las conductas que este autor nos describe como los enemigos de la quinta república y yo digo, de todas las repúblicas. Si quieren ahondar más, el libro “Los Enemigos de la Quinta República”. Venezuela.

Ello me lleva a la importancia de la inculcación de valores que refuercen una cultura científica que de fuerza y coherencia a esa capacidad de acción que sostiene el autor Amartya Sen, Premio Nobel de Economía (1999). En ello, estoy de acuerdo con el autor Echeverría (2003) en su libro “La revolución tecno-científica”, quien propuso a la distinción de doce (12) subsistemas de valores relevantes para el análisis axiológico de la práctica tecno-científica: valores básicos, epistémicos, tecnológicos, económicos, militares, políticos, jurídicos, sociales, ecológicos, religiosos, estéticos y morales.

En nuestra próxima entrega, se presentan algunos retos de investigación que me he planteado como tópico de investigación, basado en un enfoque de investigación – acción para comprender, diseñar e instrumentar soluciones que contribuyan a generar resultados de las redes de innovación socio-productivas.

Bibliografía consultada:

-          Ávalos I., Bifano C., García L. Pirela A. (2004). Ciencia y uso del conocimiento en Venezuela. Caracas: Edit. Fundación Polar.
-          Arvaitis, R. (1996). La relación incierta. Ciencia aplicada y desarrollo en Venezuela. Caracas: Fondo Editorial FINTEC.
-          Echeverría, J. La revolución tecnocientífica. España: FCE
-          Castells, M. (2006). La era de la información. Volumen. 1: La sociedad red. México. Edit. Siglo XXI.
-          Lander, E. “Universidad y producción de conocimiento: Reflexiones sobre la colonialidad del saber en América Latina”. En Sánchez I., Sosa R., (2004). América Latina: Los desafíos del pensamiento crítico. México: Edit. Siglo XXI.
-          Líneas Generales del Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2007-2013. Caracas: Ediciones del Ministerio Popular para la Comunicación y la información.
-          Miró, J. (2001). Los enemigos de la quinta República. Caracas: Edic. Jaime Miró.
-          Varsavsky, O. (2006). Hacia una política científica nacional. Caracas: Edit. Monte Ávila y el FONACIT.

PRIMER SEMINARIO INTERNACIONAL SOBRE INNOVACIÓN, CONOCIMIENTOS Y PROPIEDAD INTELECTUAL. CARACAS - VENEZUELA

Archipiélago Los Roques- Venezuela

Saludos innovadores. 

La Fundación Innovargh se hace eco y apoya este primer Seminario Internacional sobre Innovación.

El Hotel Marriott Caracas, los días 13 y 14 de octubre, será la sede del Primer Seminario Internacional sobre Innovación, Conocimientos y Propiedad Intelectual, organizado y convocado por Eureka. El programa contempla interesantes conferencias e interacción con líderes de importantes organizaciones globales de diferentes ámbitos, entre otros Feng Jun (China), Carolina Angarita (Colombia), José Luis Sagarduy (España), y una videoconferencia con David Francis (Inglaterra), creador de la metodología Managing Innovation. Ellos prestarán su valiosa colaboración para que conozcamos las mejores prácticas mundiales en estos temas y comprendamos su potencial impacto en el desempeño final de cualquier organización.
Gestión de la Innovación y Gestión del Conocimiento son dos caras de una misma moneda, asociada precisamente con las mejores prácticas universales de gerencia y administración de cualquier proyecto o emprendimiento económico, social o político. Toda actividad desarrollada por cualquier grupo humano (comunidad, organización, empresa o país) para poder aspirar a ser considerada exitosa, debe partir de la expectativa de generación sostenida de algún tipo de valor pre-determinado; valor este que no necesariamente se reduce al ámbito de lo económico.

Por otra parte hay preguntas con respuestas tecnológicas, legales y filosóficas no tan obvias, que requieren ser analizadas tanto en particular como en contexto. ¿Qué se entiende por invención?  ¿Cómo puede llegarse al desarrollo de una invención? ¿Cuándo debe iniciarse un proyecto de investigación? ¿Cómo puede alcanzarse este conocimiento?  ¿Cómo se protegen las invenciones? ¿Qué ventajas proporciona la protección de una invención?

Este seminario internacional será un espacio en el cual, los integrantes del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, como empresas, universidades, centros de investigación y autoridades nacionales, encontrarán claves y orientación estratégica para la creación, uso, difusión y protección del conocimiento.

Más información, reservaciones e inscripción contáctanos: info@eureka.org.ve o por el 0212 - 285.43.30 y 892.21.70

www.eureka.org.ve

sábado, 18 de septiembre de 2010

Secretos de la Creatividad. Mente Creativa

Saludos innovadores!!!

Gracias pos estar pendiente de estas píldoras de información que dejamos de vez en cuando y de cuando en vez. En esta oportunidad, algo sabroso sobre cratividad de un autor amigo y profesor colombiano, quien estuvo de visita por Caracas en el 2009:
La creatividad también puede entrar en su vida cotidiana; así como en el contexto organizacional. En el ámbito personal necesitamos incorporar en nuestro sistema de creencias, la importancia del pensamiento creativo, por ejemplo, “siempre hay otra solución, otro camino posible”.

Desde el contexto organizacional, es necesario trabajar la cultura organizacional, los valores, darle la bienvenida a las políticas impulsoras y de apoyo a la investigación, reflexión y aplicación; Asimismo, estructurando y alineando los procesos de recursos humanos basados en competencia actitudinales a la estrategia de la organización; por ejemplo, de aprendizaje continuo, creatividad, toma de riesgo, cambio organizacional. Siguiendo en lo individual, el autor Diego Parra Duque. (2003). Creativamente, Edit. Norma, nos regala los siguientes secretos:

1.- Apagar el piloto automático. Usualmente, aprendemos a solucionar los problemas desde nuestra manera habitual de ver las cosas; la costumbre en acción. La idea es cuestionar continuamente sobre las rutinas y maneras habituales con la que vemos y pensamos las cosas. Esta es una forma de apagar el piloto automático. Un ejemplo, ¿Cuántos 9 hay entre el número 1 y 100?. Si le da 11, cuestione la manera en que contó y verá que da más.

Consejos para apagar el Piloto Automático:

-Nunca se case con la primera respuesta o solución que se le aparezca ante un problema cualquiera.

-Desconfía de los expertos. Muchas veces están tan seguros de sus verdades que mantienen sus pilotos encendidos.

-Sea un pensador activo e imagínese a otras personas solucionando el problema.

2.- Vivir en la abundancia de ideas. Nada es más peligroso que poner en práctica la única idea que se tiene. La generación de múltiples ideas por parte de un equipo, hace que con el tiempo, se vuelvan más eficientes generando mejores ideas. La variedad te hace comparar, evaluar, ponderar y desechar, hasta adquirir esa competencia de la acuciosidad y precisión.

Consejos para generar variedad de ideas:

-Brainstorming. Un ejemplo: ¿En que se parecen una nevera y un perro?. Genere 30 ideas y verá que podrá llegar a 60.

3.- Eliminar reglas y supuestos inexistentes. Las reglas son importantes, pero en materia de generación de ideas, será importante respetarlas cuando es moral y prudente hacerlas. Examine brevemente la siguiente ecuación: CINCO POR CUATRO VEINTE, MÁS DOS , IGUAL A VEINITRÉS. A primera vista, parece incorrecto, pero: 5 X 4,20 + 2= 23

Consejos:

-Hágase la pregunta: ¿Y Quién dijo que...?...¿Y quién dijo que ...no puedo tomar una ruta distinta hacia el trabajo, o examinar que la que utilizo es la más eficiente?

4.- Diseñar combinaciones inusuales. Imagínese que va a acampar en una montaña y se lleva en el morral: Chocolates, lámparas, cuerdas, comida, linterna, reloj y una carpa. Imagínese que empiezan a congeniar mientras usted duerme: El morral con la carpa, el chocolate con la linterna,,,etc construya, por ejemplo una historia con una de esas combinaciones y verá. Gutenberg combinó el mecanismo para prensar el vino y para acuñar monedas: La imprenta.

5.-Redefinir los problemas. Problema inicial: ¿Cómo vender más muebles cada mes?...Redefinición: ¿Cómo hacer que más clientes nuevos visiten mi almacén cada mes?; ¿Cómo aumentar la frecuencia de visitas de cada uno de estos clientes?

6.- Desenmascarar las motivaciones.

-No se asuste si se enamora de lo que hace y busca hacerlo por mucho tiempo (uno hace lo mejor cuando es aquello que más le gusta); -conozca, comprenda, comprenda, practique, desarrolle, utilice, explore, disfrute y siéntase orgulloso de sus mayores fortalezas, la motivación intrínseca es clave. –aprenda a liberarse de las expectativas de los demás y trate de liberarse de todos los juegos que lo hacen jugar, juegue su propio juego; -busque grandes maestros y mentores en los temas que le interesan. –aprenda a ejercer la interdependencia (aprenda a depender de los otros, regalando libremente parte de sus fortalezas, de aquello que le sobra porque tiene mucho. Genere espacios para estar solos y crear ese flujo de energía creativa en aquello en lo que usted es mejor.

7.- Concentrarse en procesos y no en productos. Este secreto tiene que ver con la apertura de ese artista interno que todos tenemos que exploramos búsquedas, algunas premeditadas y otras no; por lo que la idea es no esperar resultados inmediatos de nuestras búsquedas. Es ese enfrentarse con lo desconocido y explorar azarosamente, la forma de solucionarlos o de crear alternativas u opciones creativas.

Si desea contactar al autor Diego Parra, su correo electrónico es diegoparra@pdacol.com

La imagen arriba es del Paseo de la Chinita, Ciudad de Maracaibo, Estado Zulia, Venezuela. Càmara: Sony Cybershot.

Hasta pronto,

sábado, 4 de septiembre de 2010

El Estado del Arte de las Relaciones Indistriales y la Gestión del Talento Humano

Saludos innovadores. De regreso de vacaciones, turismo nacional.



En esta oportunidad les presento un resumen de entrevista a Dave Ulrich por Rich Vosburgh



La Fundación Innovarh ofrece el siguiente resumen de la traducción de la entrevista de uno de los autores guía de la teoría y práctica de la gestión de RRII y RRHH:

El mensaje de la entrevista se inicia con el planteamiento de los ocho (8) retos que tiene la carrera:


1.- First, we need to let go and move forward = Necesitamos arrancar y movernos hacia delante.-

Ulrich quiere decir con ello que debemos buscar la validación de nuestro trabajo internamente entre nosotros mismos y no buscar validación externa, ya sea en los supervisores, en los gerentes de línea o alta gerencia, etc. Debemos tener siempre nuestra estima en la profesión por alto.

Sin embargo, nos dice que nosotros (los de RH) seguimos siendo nuestros propios enemigos. Debemos ser más colaborativos y ayudarnos.

Nuestra propia estima debe estar enraizada en el valor que generamos para los demás. Nuestros estándares deben ser definidos y entregados con un valor excepcional para nuestros trabajadores, clientes e inversionistas.

Generamos valor a otros debido a nuestra propia autoestima. Nuestro propósito deberá ser impactar, no solamente ser oídos.

2.-We need to use what we have = Tenemos que hacer uso o servirnos de lo mucho que se ha avanzado en nuestro campo.

La ciencia, la investigación y las mejores prácticas existentes en el campo de los recursos humanos ya son suficientes para que cualquier profesional de RH se convierta en un socio estratégico clave en la administración de cualquier negocio. Muchos de nosotros no nos preocupamos con conocer los grandes autores del pasado: Maslow, Drucker, Argyris y otros; así como la investigación, la búsqueda incesante de las teorías sobre RH, las mejores prácticas, tales como las competencias, el Balanced Score Card de RRHH y otros.

3.- We need new models and theories that push us forward = Necesitamos aún más modelos y teorías para seguir adelante.

Necesitamos seguir construyendo nuevas agendas de investigación a un macronivel de la profesión de RH y dentro de cada dominio del área de RH. Nos hemos desplazado del rol experto administrativo a generar capacidades organizacionales como un mecanismo de definir productos y servicios desde RH. Desde la práctica de RH en las distintas áreas, debemos generar e implantar un continuo flujo de innovaciones acerca del modelo de competencias, en el reclutamiento y selección de talentos, en el entrenamiento y desarrollo.

La nuestra debe ser una carrera de ideas primero y de técnicas y herramientas luego.

3.- We need to align more of what we do with external stakeholders = Debemos alinearnos más con nuestros actores interesados externos.

Alinear aún más, el trabajo de RRHH con los requerimientos y requisitos de nuestros clientes y actores claves internos y externos. Nos mantenemos centrados en el trabajo interno antes que lo que está sucediendo externamente en materia de RH.

4.- We need to do better succession planning of our own profession = Necesitamos hacer mejor planificación de sucesión en nuestra propia profesión.

Esto hace referencia a que debemos formar a nuestros propios reemplazos para el futuro en áreas como Gerencia del conocimiento, coaching para líderes, formación de especialistas, generalistas y apoyos en sistemas de información para RRHH. Todos somos un solo equipo.

5.- We need to have a strong voice in legislative affairs through professional associations = Necesitamos tener mayor participación en asociaciones profesionales.

6.- We need to find new delivery channels for our work = Necesitamos encontrar nuevos canales para los servicios de RRHH.

Ejemplos incluyen Portales de RH, intranet de RH, outsourcing de servicios de RH. Necesitamos ser competentes antes que compasivos (competitive vs compassionate)

7.- We need to keep the “human” in Human Resources = Necesitamos mantener lo humano en recursos humanos. Construir integridad a través de la ética.

No podemos siempre hacer a las organizaciones un lugar seguro para la gente, de alguna manera debemos hacer segura la organización de la gente.

8.- We have begun to bridge some gaps that have existed = Necesitamos errar la brecha entre:

8.1. Academia and practice = entre la academia y la práctica

8.2. Doable and deliverable = Entre el hacer y los entregables

8.3. Strategic and operational = Entre lo estratégico y lo operacional

8.4. Individual and organization = Entre lo individual y lo organizacional

8.5. Compassion and competitiveness = Entre la compasión y la competitividad

8.6. Past and future = Entre el pasado y el futuro

- Mensaje: We have pockets of exceptional innovation = Tenemos lo suficiente para hacer innovaciones excepcionales en RRHH.

- We have become good at building companies with work environments, cultures, or identities that go beyond any individual leader or practice

-Somos buenos en crear organizaciones con ambientes de trabajo, cultura o identidades que van más allá de cualquier práctica individual o liderazgo individual

- We have networked better than ever = Hemos hecho un buen trabajo de red

- We have become a field of ethical, concerned, and caring professionals = Hemos convertido nuestro campo en un campo ético, interesado en el hombre y que hace buen cuidado de nuestros asuntos como profesionales.

Saludos y hasta la próxima,